Es lo que hay con vivir en el páramo, como nadie vive en lugares así todas las fotos de tu lugar quedan exóticas, y eso ya es un plus a favor. Como además son buenas, ya tenés todo ganado. Salvo la segunda. Pero es un melindre personal, no me gustan los soles en el encuadre. Y aunque debería gustarme más la última, que está bien buena, la primerísima es la primera, con los planos de cerros perdiéndose en la calima...